Según siempre mi experiencia como persona que convive hace ya bastantes años con el dolor crónico, la base principal para iniciar el camino hacia la recuperación de la vida que merezco, fue sentir y creer profundamente que debía realizar un cambio, y ese cambio fue pasar de paciente a persona. Este proceso de cambio lleva implícitos una serie de pasos que detallo a continuación:
1. Aceptación. La aceptación del dolor es el inicio del proceso de afrontamiento, entender que se quedará de por vida no significa resignarse, solo entender y aceptar para poder afrontar.
2. Involucrarse. Para ello es básico adquirir un papel activo en la mejora, básicamente a través del autocuidado y colaborando con los especialistas y personas involucradas del entorno.
3. Establecer prioridades. Más allá del dolor está la vida y se puede recuperar una buena calidad de vida, creer firmemente en esta posibilidad y avanzar con pequeños pasos cada día. Detallar una lista de prioridades en el camino hacia la recuperación, es marcar de forma concreta lo verdaderamente importante que marca el camino a seguir.
4. Establecer metas realistas. Fragmentar grandes objetivos, celebrar pequeños los logros diarios y disfrutar de los éxitos son sin lugar a dudas genera grandes avances.
5. Derechos. Al respeto, a la equivocación, a tomar decisiones sin necesidad de justificarlas.
6. Reconocer las emociones. Las emociones afectan directamente al bienestar físico, reconocer los sentimientos y canalizarlos de forma correcta ayuda a disminuir el estrés y el dolor.
7. Relajación. Mediante técnicas de relajación se alivia el estrés y se recupera el control del cuerpo. La respiración consciente puede resultar una técnica sencilla y de gran ayuda.
8. Realizar ejercicio. De forma moderada, teniendo en cuenta las posibilidades y la condición física existente. Una mejor forma física disminuye considerablemente la presencia de dolor.
9. Tener una buena perspectiva. El dolor no debe tener el protagonismo de la vida. No sentirse víctima, potenciar habilidades, establecer prioridades y metas ayuda a tener una visión más beneficiosa de la situación.
10. Compartir. Tanto con nuestro entorno como con otras personas en la misma situación. Aprender de las experiencias y compartirlas es una forma de avanzar y superar adversidades.
Son diez pasos que generan un gran cambio, evidentemente se trata de un progreso diario, siempre con pequeños objetivos con los que avanzar hacia una calidad de vida plena.
Fuentes: American Chronic Pain Association
Comments